En el programa "La semana con el papa León XIV" resaltamos una semana en la que, ante las negociaciones por alcanzar acuerdos en conflictos como el de Ucrania y en Gaza, León XIV ha reiterado su llamado a la paz, reclamando alto el fuego en Ucrania, la resolución de la crisis humanitaria en Gaza y la liberación de los rehenes israelíes, lo hizo en sus saludos en los ángelus que presidió el viernes 15 de agosto Solemnidad de la Asunción de la Virgen María y el domingo 17. También respondiendo a periodistas a su llegada el miércoles 13 a la Villa Barberini en la ciudad lacial y cuando terminó su descanso en Castelgandolfo.
Jornada Mundial de ayuno y oración
Ayer miércoles en la catequesis, el Pontífice convocó para el 22 de agosto, fiesta de la Virgen María Reina, una jornada mundial de oración y ayuno por la paz, recordando que “sin perdón nunca habrá paz”.
“Implorando al Señor que nos conceda la paz y la justicia, y que enjugue las lágrimas de quienes sufren a causa de los conflictos armados en curso”
También insistió en que los conflictos “no se resuelven con la guerra”, y pidió a los fieles incluir en sus intenciones la paz para Ucrania, Oriente Medio y todo el mundo.
Siempre el diálogo
El Papa al responder a periodistas el miércoles 13 reconoció que la Santa Sede “no puede detener las guerras”, pero reiteró que su papel es acompañar, impulsar el diálogo y mantener viva la esperanza.
En la solemnidad de la Asunción de la Virgen María León XIV advirtió que la violencia mundial se expande con una frialdad “sorda e insensible a cualquier gesto de humanidad” y llamó a los fieles a no resignarse a la lógica de las armas e invitó a encomendar la paz a la Virgen María, recordando que “sólo en la misericordia de Dios es posible encontrar de nuevo el camino de la paz”.
El domingo, el papa León XIV pidió orar para que tengan éxito los esfuerzos internacionales por poner fin a las guerras y promover la paz, sobre todo en Ucrania y en Gaza, subrayando que en toda negociación debe primar el bien común de los pueblos.
“Oremos para que tengan éxito los esfuerzos por poner fin a las guerras y promover la paz; para que, en las negociaciones, se anteponga siempre el bien común de los pueblos.”
Al respecto, el martes 19 dijo a periodistas que, "Hay esperanza, pero todavía tenemos que trabajar mucho, rezar mucho, y buscar realmente el camino a seguir, para encontrar la paz".
En este contexto, este 22 de agosto, el Papa invitó a una jornada mundial de oración y ayuno por la paz, encomendando de modo especial a Ucrania y Oriente Medio, evocando a María como Reina de la Paz.