Horas después de que se conociera la triste notica del accidente en el Francis Scott Key, que se derrumbó por la colisión de un carguero contra uno de sus pilares, el arzobispo de Baltimore, monseñor William E. Lori, arzobispo del Baltimore, celebró una misa en la catedral de María Nuestra Reina en donde pidió a los fieles orar por el eterno descanso de los trabajadores que perdieron la vida y para mitigar el dolor de sus familiares.
“Nuestros pensamientos están dirigidos a nuestros hermanos que perdieron sus vidas y a sus seres queridos que enfrentan esta noticia impensable e inesperada”, dijo el arzobispo Lori durante su homilía la noche del martes 26 de marzo de 2024.
Agregó que “si bien sabemos que nuestras vidas son frágiles, un momento como este nos recuerda lo que puede cambiar en un instante. En la caridad de nuestras oraciones de esta noche, elevamos estas almas, las que se han ido y las que quedan, al Señor de la vida y del amor”.
El arzobispo Lori señaló que “los hombres de mar de todo el mundo, personas que ya trabajan en condiciones muy difíciles, ahora están varadas en el puerto de Baltimore. Muchos hombres y mujeres de nuestra región cuyos medios de vida dependen de nuestro puerto están llenos de miedo e incertidumbre al mirar el camino que les espera”.
El arzobispo de Baltimore puntualizó que las comunidades de toda la región se verán “afectadas por la interrupción de este vínculo de transporte vital”, enfatizando que en los próximos días exigirán “preocupación, amor y generosidad constantes” en apoyo a los afectados por el colapso.
“A menudo sucede que cuando ocurre una tragedia, nos sacudimos de nuestra forma normal de ver las cosas, nuestros corazones se conmueven al pensar en aquellos que están impactados y sufriendo. Pero a medida que pasa el tiempo y se nos imponen las exigencias normales de la vida diaria, es fácil para nosotros olvidar esta experiencia y olvidar a aquellos cuyas vidas no volverán a la normalidad”, concluyó el arzobispo Lori su homilía.
(El texto de la homilía del arzobispo William E. Lori fue publicado en la página web de The Catholic Review)
