El director de la Oficina de Prensa de la Santa Sede, Matteo Bruni, informó a los periodistas este miércoles 30 de abril de 2025 que 180 cardenales asistieron a la séptima Congregación General, de los cuales 124 eran cardenales electores.
En la primera parte de la reunión, se debatió sobre la situación económica y financiera de la Santa Sede, con intervenciones de los cardenales Reinhard Marx, Kevin Farrell, Christoph Schönborn, Fernando Vergez y Konrad Krajewski.
El cardenal Marx, coordinador del Consejo para la Economía, presentó varios desafíos, cuestiones y propuestas desde la perspectiva de la sostenibilidad, con el objetivo de garantizar que las estructuras económicas sigan apoyando las reformas papales.
Por su parte, el cardenal Schönborn, presidente de la Comisión de Supervisión del Instituto para las Obras de Religión (IOR), expuso detalles sobre la situación de la institución. Mientras tanto, el cardenal Vergez ofreció información sobre la Gobernación del Estado de la Ciudad del Vaticano, destacando las obras de renovación en curso.
El cardenal Krajewski, Limosnero Papal, también intervino para compartir las actividades del Dicasterio para el Servicio de la Caridad.
En la segunda parte de la Congregación General, 14 cardenales abordaron diversos temas, entre los que se destacaron la eclesiología del pueblo de Dios, la herida causada por la polarización dentro de la Iglesia y la división en la sociedad, la sinodalidad y la colegialidad episcopal como medios para superar la polarización, y las vocaciones al sacerdocio y a la vida religiosa. También se leyó el comunicado del Colegio en el que invitan a acompañar espiritualmente el proceso hacia el Cónclave.
Se hicieron varias referencias a los textos conciliares Lumen Gentium y Gaudium et Spes, y se debatió sobre la evangelización, con un énfasis particular en la coherencia entre lo que se vive y lo que se proclama.
La Congregación General concluyó a las 12:30 con el rezo del Regina Coeli.
La próxima Congregación se desarrollará el viernes 2 de mayo a las 9 de la mañana. No habrá Congregación General ni el jueves 1 ni el domingo 4.
En respuesta a las preguntas de los periodistas, Bruni comentó que dos cardenales no estarán presentes, como se había anunciado previamente. Además, mencionó que aún faltan nueve cardenales, aunque no se han ofrecido más detalles sobre su ausencia. Se señaló que algunos están confirmados y otros se esperan.
Es importante destacar que solo los cardenales asisten a las Congregaciones; ningún otro miembro de la Curia Romana está invitado.
La declaración de esta mañana sobre el número de cardenales electores y la decisión del cardenal Becciu se consideró un "mensaje de las propias Congregaciones".
No se espera la presencia de intérpretes en la Capilla Sixtina.
Durante las Congregaciones Generales, se realiza una pausa a media mañana, no después de las intervenciones individuales. Este intervalo es importante para que los cardenales tengan tiempo para descansar e intercambiar opiniones.
Después de la Misa pro eligendo Pontifice, los cardenales deben trasladarse a la Casa Santa Marta. Mientras tanto, cada cardenal tiene su propio lugar de residencia en Roma. Primero se debe desalojar las habitaciones, luego realizar las obras necesarias y recibirlos. Los sellos de la habitación del Papa en Santa Marta serán retirados tras la elección del nuevo Pontífice, las habitaciones quedan reservadas para el nuevo Papa.
También se mencionó la situación del cardenal de Sarajevo, Vinko Puljić, quien está gravemente enfermo pero, siguiendo el consejo de sus médicos, asistirá al Cónclave, probablemente emitiendo su voto desde la Casa Santa Marta. Se brindarán instrucciones adicionales sobre esta y otras situaciones similares en cuanto se determinen los detalles.
Finalmente, se anunció que habrá dos votaciones por la mañana y dos por la tarde (en total, cuatro), con fumatas al final de la mañana y de la tarde, a menos que la elección se produzca antes de lo previsto, en cuyo caso el proceso se adelantaría.