El milagroso Cristo Negro es un ícono de la fe de los guatemaltecos, quienes son embajadores del Señor de Esquipulas que deben transmitir la devoción de los abuelos a las nuevas generaciones, expresó el obispo Evelio Menjívar en la misa en honor al patrono de Guatemala celebrada en la iglesia San Miguel Arcángel de Silver Spring, Maryland, el 14 de enero de 2024.
"Es la imagen de Jesús que entregó su vida para salvarnos", dijo en su homilía aclarando que los salvadoreños también tienen una gran devoción por el Señor de Esquipulas como su propia madre que no se perdía una peregrinación. Es que todos, dijo, somos abrazados por el mismo amor del padre.
Monseñor instó a renovar la devoción, a despejar el miedo, la apatía, la depresión, el sentido de inferioridad. "El Señor siempre nos abraza y nos mira con amor. Búscalo y lo demás vendrá por añadidura. Debemos estar en sintonía con la voz de Dios que nos habla a través de su palabra y los acontecimientos de la vida diaria", expresó.
Considera que hay personas que hacen peregrinaciones, que se tatúan el rosario alrededor del cuello, pero eso no es garantía de que tienen una relación personal con el Señor.
Hay más de 1.300 millones de católicos en el mundo, de los cuales 68 millones viven en Estados Unidos. Se pregunta si tantos católicos hacen la diferencia. "Muchos bautizados siguen dormidos en la fe. Muchos ni se molestan en ir a misa el domingo. ¿Qué tipo de católico eres si no practicas la fe?", preguntó el obispo.
La fe, aclaró a los presentes, es creer y practicar los valores que Jesús nos enseñó. "Dios nos invita a establecer una relación personal con Él. Jesús quiere que pasemos tiempo con Él. Conocer a Jesús es amarlo y servirlo".
"Pidamos al Señor de Esquipulas que vuelva su mirada compasiva hacia nosotros", dijo el homilista instando a los fieles a alejarse de los vicios y del deseo desordenado de consumir y poseer.
La fiesta del Señor de Esquipulas es una muestra más de religiosidad popular en la Arquidiócesis Católica Romana de Washington. Comenzó con este servicio religioso que incluyó la solemne entrada del Cristo Negro en andas y su romería -un grupo de personas que cargan la imagen y se van balanceando al ritmo de marimba hasta llegar al altar.
Luego hubo una recepción -tipo convivio parroquial- con comida típica guatemalteca. La festividad es organizada por la Hermandad del Señor de Esquipulas de Silver Spring.
Cristo Negro de Guatemala
Esta devoción ha unido a personas de diferentes países ya que se ha extendido también a Nicaragua, Honduras, México y El Salvador. La imagen de Jesucristo crucificado se encuentra en la basílica de Esquipulas en la ciudad del mismo nombre, en Guatemala. A lo largo de más de 400 años de veneración, la madera en que fue tallado ha adquirido una tonalidad más oscura y por eso se le atribuye el nombre de Cristo Negro. Desde el siglo XVII se le conoce como el “Milagroso Señor de Esquipulas”.
La fiesta patronal de Esquipulas se celebra el jueves de la ascensión, cuando llega la mayor cantidad de peregrinos desde México y países centroamericanos a esa ciudad. La costumbre es ingresar a pie hasta el templo, en parte por devoción y en parte porque la aglomeración no permite hacerlo de otra manera. Quienes van a pedir por alguna intención especial hacen parte del recorrido de rodillas.
Durante su homilía, el obispo Menjívar pidió a los presentes que se unan en oración para que cesen las guerras y la violencia y haya paz en el mundo. También pidió a Dios por la paz, unidad y progreso en los países latinoamericanos y en especial en Guatemala.
El lunes 15 de enero fue la toma de posesión del nuevo presidente guatemalteco, Bernardo Arévalo, por eso el prelado aprovechó para pedir que el Señor ponga a ese país en el camino de la justicia y fraternidad. "Pidamos que en el nuevo Gobierno prime la sabiduría y honradez para trabajar por el progreso y bienestar de la gente en el país de la eterna primavera".