Horas después de que Estados Unidos bombardeara las instalaciones de enriquecimiento nuclear en Irán, el papa León XIV calificó la situación en el Medio Oriente de "alarmante" y dijo que la diplomacia era el único camino responsable.
"Todo miembro de la comunidad internacional tiene la responsabilidad moral de detener la tragedia de la guerra, antes de que se convierta en una vorágine irreparable", dijo el Papa el 22 de junio tras recitar la oración del Ángelus con miles de personas en la Plaza de San Pedro.
A finales del 21 de junio, el presidente Donald Trump anunció en Washington que "el ejército estadounidense llevó a cabo ataques masivos de precisión contra las tres instalaciones nucleares clave del régimen iraní: Fordo, Natanz e Isfahan".
"Nuestro objetivo", dijo Trump, "era la destrucción de la capacidad de enriquecimiento nuclear de Irán y poner fin a la amenaza nuclear planteada por el estado patrocinador del terror número uno del mundo".
"Esta noche puedo informar al mundo de que los ataques fueron un éxito militar espectacular", dijo Trump, añadiendo que los sitios de las instalaciones habían sido "completa y totalmente arrasados". El presidente estadounidense también amenazó con que si Irán no hacía las paces entonces "los futuros ataques serían mucho mayores y mucho más fáciles".
Los bombardeos estadounidenses se produjeron 10 días después de que Israel comenzara a llevar a cabo ataques contra las instalaciones nucleares iraníes y su infraestructura militar, lo que llevó a Irán a tomar represalias disparando misiles contra Israel. Las autoridades han informado de que los ataques han causado la muerte de al menos 400 personas en Irán y 24 en Israel.
Dirigiéndose a la multitud en la Plaza de San Pedro, el papa León dijo que la gente de todo el mundo rezaba y clamaba por la paz.
"Es un grito que exige responsabilidad y razón, y no debe ser sofocado por el estruendo de las armas", dijo el papa León. "No existen conflictos 'lejanos' cuando está en juego la dignidad humana".
Además, dijo el Papa, con el "escenario dramático" del bombardeo de Irán, "corre el riesgo de caer en el olvido el sufrimiento diario de la población, especialmente de Gaza y los demás territorios, donde la necesidad de una ayuda humanitaria adecuada es cada vez más urgente", ya que la atención del mundo se dirige hacia otros lugares.
"La guerra no resuelve los problemas, sino que los amplifica y produce heridas profundas en la historia de los pueblos, que tardan generaciones en cicatrizar", afirmó. "Ninguna victoria armada podrá compensar el dolor de las madres, el miedo de los niños, el futuro robado".
"¡Que la diplomacia haga callar las armas!", dijo el Papa León. "¡Que las naciones tracen su futuro con obras de paz, no con la violencia ni conflictos sangrientos!".
